lunes, 14 de enero de 2013

Tranquilidad

         Algo más de las 11 de la noche, escrbiendo estas lineas mientras navego un rato por facebook. A mi derecha, en la cama, tapada hasta el cuello, mi niña. Me dice que le gusta verme aquí, tranquilo, haciendo mis cosas, mientras ella está tumbada en la cama agusto. 

        Sin embargo no puedo evitar sentirme un poco mal, por tenerla "abandonada". Y por otro lado, no puedo dejar de mirarla, y sentir una calma, una tranquilidad nunca antes vividas, por tener a la persona mas importante de mi vida en mi cama, por poder observarla, por pensar en lo que me ofrece, dia a dia, incluso cuando no hace mas que estar tumbada con los ojos cerrados. 

          Si supiera todo lo que me ofrece, todo lo que tengo que agradecerle, con el simple hecho de estar ahí, tumbada... Es algo inexplicable, como con su mera presencia, es capaz de tranquilizarme, hasta olvidar todos los problemas, todos los cabreos que haya podido tener. Simplemente mirarla, verla sonreir, mientras espera que vaya a la cama con ella... Es algo impagable.

martes, 8 de enero de 2013



             Sentado en el sofá, frente al portátil, miro a la derecha y veo la cama. Está deshecha, las mantas rozando el suelo, las sábanas arrugadas… Hace poco más de 14 horas, la imagen era totalmente distinta. Volví a la habitación tras cenar, habiendo dejado a mi niña en la cama escuchando música. Al llegar y abrir la puerta, me sacudió la que sin duda considero la imagen mas bella que he visto nunca. Ahí estaba ella, dormida, tapada, una ligera sonrisa se escapa de su boca cerrada, desprendía tranquilidad, tanto que me quedé embobado de pié, junto a la puerta, sin querer emitir un solo sonido que pudiera despertarla.

            Cada segundo era precioso, podía oírla respirar, podía ver como se movía levemente bajo las sábanas, podía ver su sonrisa. Y sobre todo, me sentía tranquilo, completamente relajado, disfrutando de esa visión que otras veces había visto pero que, cada vez, resulta igual y diferente.

               De pronto una respiración profunda y salgo de mi ensimismamiento, vuelvo a recobrar el sentido, y no puedo más que sonreír, ampliamente, al recordar que ella está ahí, esa es mi cama, y esta noche dormiré con ella.

            Después, vinieron empujones, un intenso olor a coco, un bocadillo de chorizo pamplona, una mandarina, vueltas de campana (hacia delante y hacia atrás), risas, muchas risas, y por fin, abrazados, el sueño.

            Y esto es precisamente lo que me encanta de mi niña, puedo estar de pie, embobado, mirándola dormir, disfrutando de esa imagen que tanto me transmite, y al poco, riendo a carcajadas hasta destrozarme la garganta. Está loca dice… ¡Y qué suerte la mía!

viernes, 4 de enero de 2013

Sorpresa.

          Tengo una sorpresa preparada para alguien. Una sopresa muy especial. Sin duda marcará un antes y un después, y si la persona que va a ser sorprendia, realmente tiene tan buena memoria como de la que hace gala, sabrá el por qué de tal cambio. 

          No voy a dar detalles, faltaría mas. Es algo en lo que llevo trabajando (es una forma de hablar) un buen tiempo, al menos dos meses, algo que hará que cambiemos los dos, el 99% yo.  Sin duda para bien. 

          Cuando lo tenga, espero que sea dentro de no mucho, todo cobrará sentido, todo se hará como quiero que se haga, y todo este tiempo, lleno de dudas, de esperas... por fín tendrán una pequeña explicación.

            Me hubiera gustado que estuviera para mañana, por motivos obvios, pero aún tendrá que esperar al menos dos semanas mas. Confio en que merecerá la pena. Hasta entonces...

jueves, 3 de enero de 2013

Confianza.

      ¿Qué es la confianza? Según la RAE; Esperanza firme que se tiene de alguien o algo.

     Bien, para cada uno, cuando pensamos en confianza, pueden venirnos mil ejemplos sobre lo que nosotros podriamos denominar confianza. Ahí va el mio.

      Confianza es lo que se siente cuando una persona no te esconde quién es, como se ha forjado, cuando no esconde sus verdaderos sentimientos. Cuando te habla sin tapujos, sin suavizar las cosas. Cuando diga lo que tenga que decir, lo dice a la cara. 

     Confianza es lo que sientes cuando alguien te permite acercarte a lo que mas ama en este mundo. Cuando permite que trates, que juegues, que compartas momentos con esa parte de si mismo por la que daria la vida antes de cualquier otra cosa. Cuando una persona te permite, no solo conocer, sino jugar, enseñar, castigar a sus hijos, eso es confianza. 

       Confianza es que actue como siente, en cada momento, sin miedo al "qué pensará", siendo tan solo, como quiere ser, porque sabe que de la otra parte, nunca va a recibir una mala mirada, o una mala cara. 

        Pero hay otras formas de medir la confianza. Cuando te desnudas, literalmente, sin esconderte, sin tapar los defectos que puedas tener, sabiendo que solo encontrarás palabras de elogio y admiración, eso es confianza. 

         Y hace poco, he descubierto que esa confianza puede ser mucho mayor, puede resultar en una relación tan intensa, tan profunda, tan extrema, que la palabra confianza se queda corta. Cuando el sexo deja de ser solo sexo, cuando el ejercicio mecanico deja sitio a otra clase de juegos, en los que la mente tiene mucho mas poder, la confianza no solo es la base, sino algo que se va trabajando dia a dia, que va aumentando, hasta ser la piedra angular de la relación. 

           Hablo de un sexo mucho mas oscuro, tenebroso, que ha conseguido que vea con mucha mayor claridad. Ha conseguido que disfrute mucho mas, sabiendo que, la persona que está conmigo, va a disfrutar tanto como yo. Sabiendo que se ha entregado a mi, porque tiene plena confianza en que no solo cuidaré de ella, sino que disfrutaré. 

            Llevo dos dias en esto. Cada dia con mas ganas. Cada dia mas seguro de lo que llevo dentro. Cada dia con mas interés en todo lo que conlleva, cada dia con mas pasión y entrega. 

            Para mi, todo esto es la confianza. Si bien es clave en todas las relaciones, en muchas es algo que se vá forjando poco a poco. En la mia lo considero la base sobre la que trabajar. Y dia a dia lo voy haciendo.
       

martes, 1 de enero de 2013

Año nuevo, vida nueva.

        Oficialmente 2 de enero. Vaya primero de año he tenido. Han sido, con diferencia, las mejores navidades de mi vida.

            En nochevieja cené en casa, con mi padre, bueno, cenita tranquila, uvas, todo el rollo ese, y después pasé la noche con mi niña. En año nuevo hemos despertado a eso de las 11:30 de la mañana, hemos salido a dar una vuelta y al final, se ha animado y ha comido en casa con mi padre y conmigo. Una buena comida sin duda, lo he pasado genial. Está ella y parece que todo se relaja, no hay tensión, no hay problemas. La comida se ha alargado hasta las 6 de la tarde, y bueno, hemos bebido mucho. Al final, y resumiendo, hemos despertado a las 22:00 "de la siesta", vaya par, vestirnos, he salido a comprar algo para cenar y de paso acompañarla al bus.

          Mañana tocará dar explicaciones al aita de por qué no he contestado a las llamadas ni por qué he subido a cenar... Pero como se dice, bihar, biharkoak.

           A lo que iba al principio. Este año me ha traido, muchas decepciones, grandes putadas, y algo muy bueno. Algo excepcional. A mi niña. Me ha cambiado la vida. Tras muchos años, toda la vida, siendo quien no era, protegiendome bajo kilos de coraza, disfrazado de un cabrón sin sentimientos, ella ha sabido ver, y sacar a la luz a mi verdadero yo, como suelo decir, un niñato que no sabe nada de la vida, mas sentikorra que ni sé, que está deseando no solo dar cariño sino, por qué no, recibirlo. En resumen, un blando de cojones. Pero qué se le va a hacer, hasta ahora, siendo un hijoputa frio, distante, sin sentimientos, no me ha ido nada bien, y por lo que parece, siendo como realmente soy, he conseguido tener a mi lado a la mujer mas increible que me he topado nunca.

          Empieza un nuevo año, lleno de propósitos (por mi parte, solo dos), lleno de ilusiones, ilusiones de comenzar una nueva vida, de poder largarme por fin de casa de mi padre, de poder compartir el dia a dia con mi niña, de currar, de tener un chucho, o dos, de poder saber que, pese a estar todo el dia separados, al llegar a casa podré compartir mesa con ella, podré tirarme en el sofá con ella, y podré dormir con ella y amanecer todos los dias a su lado.

            Lo dicho, me he convertido en un blando de cojones, pero qué coño, es lo que soy, a quien le guste bien, y a quien no que se joda. Por los mios daría mi vida sin dudarlo, por mi niña, lo daría todo, y espero que algún dia, pueda hacerlo.

           He empezado el año con muchas ganas y mucha fuerza, nadie sabe lo que nos deparará la vida, pero confio en que a lo largo de este año, pueda hacer algunos de mis sueños realidad.

Bueno, con esto y un bizcocho...